Piden crear patronato para pacientes renales

Las atenciones y ayudas a los niños afectados serían apadrinadas por instituciones o personalidades

HATO MAYOR.-Tres madres y un padre de niños enfermos renales pidieron al Presidente de la República y a sectores de la sociedad la creación de un Patronato Nacional de ayuda a pacientes renales, para garantizarles las debidas atenciones y la cooperación que requierentanto ellos como sus familiares.

Valencia Castillo, de San Pedro de Macorís; Deidamia Domínguez, de Hato Mayor; Martina Félix, de Pantoja, Santo Domingo Norte; y Radhamés Félix, de Higüey, tienen sus pequeños hijos bajo tratamiento de diálisis en el hospital infantil Robert Reid Cabral, de la Capital.

Destacaron la asistencia que reciben en el centro de salud, donde afirmaron que sus hijos son bien atendidos y se les suministra los medicamentos que requieren.

Sin embargo, explicaron que los mayores inconvenientes se presentan cuando deben recibir otras atenciones especializadas de médicos vasculares, ya que el centro asistencial no dispone de ninguno hasta el momento y cada estudio o cirugía cuesta fuera de este centro, entre 60 a 70 mil pesos.

En la sala del hospital Reid Cabral donde se dializa a los pacientes renales, hay adecuada higiene y los equipos funcionan debidamente, además de que hay garantía de suministro de medicamentos, según se pudo comprobar.

Los padres de los infantes afirmaron que el mayor inconveniente que presentan son los gastos en que deben incurrir, ya que gastan entre mil a mil 300 pesos interdiarios para transporte y estadía.

Apelaron a la sensibilidad del presidente Leonel Fernández, de las instituciones públicas y privadas que se preocupan por la salud y el bienestar de los ciudadanos, así como de los artistas y personalidades de bien del país, para que contribuyan con estos pacientes y sus familiares.

Abogaron porque las atenciones y ayudas a sus hijos sean apadrinadas por instituciones o personalidades, y que de esa manera sus familiares puedan llevar una vida más llevadera.

Adujeron que los viajes cada dos días desde el interior les resultan muy costosos y son familias pobres que se sacrifican económicamente para poder estar junto a sus hijos y acompañarlos durante la dialización.

Fuente: El Nacional